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Arquitectos: Bucchieri Architects
- Área: 9500 m²
- Año: 2004
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Fotografías:Kate Russell
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El sitio es una convincente parcela de 800 m2 ubicada al norte de Santa Fe. El edificio está situado en la ladera norte de una cresta, con vistas a las montañas Sangre de Cristo hacia el este, las montañas Jemez y la ciudad de Los Alamos al oeste, y San Antonio Peak, cerca de la frontera de Nuevo México y Colorado, hacia el norte.
El espacio de arte está situado en el centro del edificio y constituye el camino que conecta todas las principales zonas de la residencia, protegido desde la entrada en el sur a la pared totalmente acristalada del salón principal en el norte. Las habitaciones de la parte este y oeste están abiertas a las vistas del amanecer y la puesta del sol sobre las montañas.
La búsqueda del contexto arquitectónico histórico de la región nos conduce al Chaco Canyon, al norte de Nuevo México, y particularmente a Pueblo Bonito, construido por los Anasazi entre los años 1030 y 1079. Los Anasazi dejaron un lenguaje escrito, pero la lengua de su arquitectura, esculturas de arte rupestre y marcas de la luz solar que aún permanecen. En Pueblo Bonito, la construcción anasazi era de paredes estructurales cuyo núcleo es compuesto por ásperas piedras planas cubiertas por ambos lados con una capa de astillas de piedra arenisca friable. Estos materiales, y el uso solar de los Anasazi como indicador para marcar las estaciones al señalar los solstícios o equinócios, fueron la inspiración para la Casa Valle Escondido.
Para organizar quela trayectoria del sol al mediodía caiga exactamente en el centro de la Casa Valle Escondido, la casa fue precisamente ubicada para dar vistas a la Estrella Polar del Norte en la noche y el Sol al mediodía solar. Los deflectores de cada lado de la claraboya central permiten que un haz de luz de cuarenta centímetros de ancho alcance el centro de la planta al mediodía. A medida que el sol se mueve de este a oeste, el haz se reduce a una línea delgada cuando se acerca a la base de la pared. Sin luz directa, el sol incide directamente sobre la pared y por lo tanto a la obra de arte.
Dado que la luz natural es la mejor opción para ver el arte, a lo largo de los lados del espacio de arte un sistema de lucernarios fue desarrollado para reflejar la luz solar difusa sobre las paredes y el arte. Una maqueta de tamaño real de la sección transversal fue construída en el lugar para encontrar la conformación que bloquearía la luz solar directa, con sus nocivos rayos ultra violeta, y, al mismo tiempo, distribuyendo luz reflejada, óptima para ver el arte, a las superficies de las paredes.
Los materiales de construcción, inspirados en la arquitectura histórica de la región, fueron seleccionados para integrarse en el entorno natural. El muro de mampostería de chapa es "musgo de roca" o astillado arenisca Pecos, obtenida de la ladera norte de las montañas Sangre de Cristo. La fachada natural sin cortes con líquenes es conformada sobre un patrón inconstante de repisas rocosas con aplicación de mortero detrás de las piedras para una apariencia de seco-apilamiento. La estructura de acero es expuesta con pilares redondos de tubo asemejándose a troncos de pino desgastados usados como pilares por el antigueo pueblo Anazasi. Las barandillas de la terraza exterior son de acero resistente a la intemperie, convirtiéndose casi transparente contra el paisaje natural. Las paredes y techos están pintados de yeso para que coincida con el suelo de piedra caliza.
